Los trastornos mentales perinatales están infradiagnosticados e infratratados, lo que conlleva un grave problema de salud pública. Izaskun Pombo, ginecóloga y coordinadora de los CASSyR (Centro de Atención a la Salud Sexual y Reproductiva) de Navarra, lo achaca a que hasta ahora “no se han visibilizado” y a que “no se les ha prestado la debida atención”, pero también al tabú que hay en torno a la salud mental. “El estigma que rodea los trastornos mentales hace que la sociedad cuestione la capacidad de ser madre de estas mujeres por lo que, en ocasiones, no solicitan ayuda”, apunta Pombo.

La ginecóloga sostiene que los trastornos mentales perinatales han sido destacados en los últimos años “como un importante problema de salud pública y se ha evidenciado la necesidad urgente de mejorar la detección, prevención y tratamiento especializado”. “Requieren de un modelo de atención multidisciplinar y especializado para llevar a cabo un plan de intervención personalizado centrado en la madre y en el feto”, defiende.

Izaskun Pombo.

Izaskun Pombo. Patxi Cascante

El trabajo de los CASSyR

En este sentido, explica que en Navarra, los CASSYR disponen de psicólogas clínicas y en ellos “se está trabajando en áreas de mejora tanto en la prevención como en el diagnóstico temprano, con estrategias que promueven el fortalecimiento del vínculo prenatal y disminuyan la ansiedad durante el embarazo y el parto, como lo es una adecuada preparación física y emocional”. “El desafío futuro sería el poner en marcha instrumentos de medición pre y postnatal que mejoren la detección y derivación temprana en aras de una mejor atención a la salud mental durante el periodo perinatal”, indica la ginecóloga.