Osasuna encajó este pasado domingo en Granada su tercera derrota consecutiva en Liga, su peor racha en lo que va de temporada, pero lo peor de todo es la pésima imagen que ofreció el conjunto rojillo, sobre todo en una segunda mitad que hasta su propio entrenador, Jagoba Arrasate, afeó en rueda de prensa. “El segundo tiempo ha sido indigno de lo que debe ser Osasuna”, afirmó el técnico. Las crónicas de los periodistas de la prensa granadina y de los rotativos deportivos de tirada estatal no le llevaron la contraria al preparador vizcaíno y tildaron al cuadro navarro de equipo “flojo”, “contemplativo” y “pusilánime”.

“El plan de Sandoval funciona ante un contemplativo Osasuna”, tituló Javier Aguilera en Granada Hoy, profundizando luego un poco más en los problemas o justificaciones, según se mire, de la escuadra rojilla: “Osasuna formó con un once condicionado por las bajas, con David García y Budimir como principales ausencias, aunque con la satisfacción del deber cumplido y de haberlo hecho ya todo esta temporada”.

Para Rafael Lamelas, del Ideal, el Granada derrotó a Osasuna en un “partido apacible”, que es mucho decir sobre la escasa oposición de de “un Osasuna que mantiene automatismos hasta cuando anda plano”. Un piropo para “la obra de autor de Arrasate”, aunque también una crítica velada.

Expuso Ángel Rodríguez en su crónica para la edición digital de Marca que, “tras el paso por vestuarios, el Granada salió enchufado con la intención de sentenciar cuanto antes y Osasuna con las legañas aún en los ojos”. “Y claro, no habían pasado tres minutos de la segunda mitad y los nazarís ya celebraron el 2-0”, explicó, añadiendo que, tras el segundo tanto, “el Granada salía a la contra como Pedro por su casa y se plantaba delante de la meta rojilla sin dificultad alguna”. “Tuvo varias Uzuni, una Jozwiak y hasta Arezo, que en la primera pelota que tocó remató de primeras gracias a la fragilidad defensiva de Osasuna, pero el esférico se fue desviado por poco”, remató para dejar claro que los rojillos fueron el domingo un rival “indigno”, parafraseando a Arrasate.

En AS, Aimara G. Gil destacó en su crónica que “el Granada sigue tirando de orgullo para sumar más puntos y no ser el peor de la historia en Primera” y resumió que, “con un Jozwiak imperial, Uzuni viendo otra vez puerta y Rubio e Ignasi como un muro atrás, batió a un Osasuna venido a menos”.

Sergio Escario escribió en Mundo Deportivo que “los de José Ramón Sandoval se agarraron a un clavo ardiendo al llevarse los tres puntos ante un flojo Osasuna”, que “los visitantes notaron en demasía las ausencias de Budimir, autor del 40% de sus goles, y David García, capitán y estandarte osasunista” y que el tercer y último tanto del Granada “lo firmó en el minuto 95 Lucas Boyé al aprovechar un rechace tras tiro de Gumbau”. “Que no llegara antes en un segundo tiempo tétrico de la zaga rojilla fue un auténtico milagro”, un buen resumen de la pésima segunda mitad de Osasuna.

Para terminar, Sport se apropió de la crónica de la Agencia Efe, una de las más duras con los rojillos. “El Granada supera a un flojo Osasuna para resistirse al descenso”, fue su título. “Los últimos minutos sólo sirvieron para confirmar la floja actuación de Osasuna, que ya sin nada en juego en esta Liga estuvo muy plano y pusilánime durante todo el partido, y para que Lucas Boyé marcara el 3-0 final en la última jugada del choque”, le recriminaron a Osasuna.